Edgar Degas (1834-1917)
Planchadoras
Hacia 1884-1886
Óleo sobre lienzo
76 x 81,5 cm.
Museo de Orsay de París
Degas, que con frecuencia ha retratado a su familia o a sus amigos, también es un atento observador del mundo laboral, en los talleres de modistas o de planchadoras. Solo Daumier, antes que él, se interesó por las lavanderas de las que Degas hizo un tema de predilección entre 1869 y 1895. Abarca este tema con figuras aisladas vistas a contraluz que resaltan en la blancura de la ropa. Más tarde hacia 1884-1886, Degas recupera con insistencia este tema, pero colocando entonces dos mujeres en la lavandería.
En esta serie, el pintor realizó cuatro variaciones sobre una composición casi idéntica, es decir una figura bostezando y otra planchando con fuerza. El lienzo del museo de Orsay es la tercera reposición de esta composición.
La elección de este tema hace referencia a las preocupaciones naturalistas y sociales de algunos contemporáneos del artista, en pintura pero también en literatura. Publicado en 1877, L'Assommoir de Zola describe en efecto, la lavandería de Gervaise, y nos da a ver sin rodeos la miseria del pueblo de París. Captadas de lleno en el trabajo, agotadas de cansancio, ambas planchadoras de Degas testimonian de la mirada sin complacencia, pero no sin ternura, que el artista parece echar sobre la clase obrera.
Los gestos de cada una de las planchadoras parecen haber interesado particularmente el pintor, que pretende fijar los movimientos efímeros y cotidianos, en una representación ni heroica ni caricatural. La pintura al óleo está colocada sobre un lienzo sin apresto y de grano grueso, que ofrece un soporte granuloso y no homogéneo. Creando una textura espesa y accidentada, el tono moreno del lino, perceptible a veces debajo de la pintura, contribuye a la vibración de los colores pasteles. El tema como su tratamiento marcará al joven Picasso del periodo azul, que recuperará este tema de un modo a menudo patético.
Planchadoras
Hacia 1884-1886
Óleo sobre lienzo
76 x 81,5 cm.
Museo de Orsay de París
Degas, que con frecuencia ha retratado a su familia o a sus amigos, también es un atento observador del mundo laboral, en los talleres de modistas o de planchadoras. Solo Daumier, antes que él, se interesó por las lavanderas de las que Degas hizo un tema de predilección entre 1869 y 1895. Abarca este tema con figuras aisladas vistas a contraluz que resaltan en la blancura de la ropa. Más tarde hacia 1884-1886, Degas recupera con insistencia este tema, pero colocando entonces dos mujeres en la lavandería.
En esta serie, el pintor realizó cuatro variaciones sobre una composición casi idéntica, es decir una figura bostezando y otra planchando con fuerza. El lienzo del museo de Orsay es la tercera reposición de esta composición.
La elección de este tema hace referencia a las preocupaciones naturalistas y sociales de algunos contemporáneos del artista, en pintura pero también en literatura. Publicado en 1877, L'Assommoir de Zola describe en efecto, la lavandería de Gervaise, y nos da a ver sin rodeos la miseria del pueblo de París. Captadas de lleno en el trabajo, agotadas de cansancio, ambas planchadoras de Degas testimonian de la mirada sin complacencia, pero no sin ternura, que el artista parece echar sobre la clase obrera.
Los gestos de cada una de las planchadoras parecen haber interesado particularmente el pintor, que pretende fijar los movimientos efímeros y cotidianos, en una representación ni heroica ni caricatural. La pintura al óleo está colocada sobre un lienzo sin apresto y de grano grueso, que ofrece un soporte granuloso y no homogéneo. Creando una textura espesa y accidentada, el tono moreno del lino, perceptible a veces debajo de la pintura, contribuye a la vibración de los colores pasteles. El tema como su tratamiento marcará al joven Picasso del periodo azul, que recuperará este tema de un modo a menudo patético.