Xhanfise Keko en el set de Beni ecën vetë [Beni camina solo], ca. 1975. Cortesía de Skandal Production
Xhanfise Keko. El mundo para la infancia (1973-1984)
Ciclo de cine del 12 al 29 de abril, 2023 - 19:00 h
El cine sobre la infancia ha ocupado a destacados cineastas como Jean Vigo, François Truffaut o Abbas Kiarostami, pero muy pocos han contado con una obra caracterizada por tanta coherencia como la de la cineasta Xhanfise Keko (Albania, 1929-2007). Autora excepcional de once largometrajes de ficción realizados entre 1972 y 1984 en Albania, todos ellos tratan sobre los desafíos, las frustraciones y las aspiraciones en la infancia. Esta retrospectiva, la primera en España y una de las escasas internacionales, ofrece en pases dobles cuatro de sus películas restauradas recientemente.
Con una sensibilidad insólita, Keko retrata el mundo y la visión infantil poniendo en el centro los deseos y la psicología de esta. Todo ello implica entender la infancia no como una fase de transición hacia otra edad, sino como un periodo en sí mismo, respetando la autonomía de niños y niñas tal y como definió el filósofo de la pedagogía René Schérer. La cineasta trabaja con no-actores infantiles, niños y niñas seleccionados exprofeso para su cine, quienes se relacionan con actores profesionales. A su vez, su práctica contribuye a transformar el trabajo metódico del actor en una actividad lúdica y espontánea, siguiendo las tesis del psicólogo Lev Vygotsky de la pedagogía basada en el juego: la lectura del guion se realizaba siempre con las participantes, sin supervisión de las personas adultas tutores, pudiendo derivar hacia una reescritura según sus comentarios. Los sets de sus películas fueron un espacio abierto de juego donde todo el equipo estaba implicado; el rodaje, siempre rápido, buscaba adaptarse a la atención breve de niños y niñas; y la cámara, situada siempre a su altura, respetaba su manera de percibir el mundo. En definitiva, toda una serie de medidas para conseguir que la infancia no solo sea el tema de las películas, sino su verdadera artífice.
Su filmografía, atravesada por su condición de mujer trabajadora en la Albania comunista durante las décadas de 1970 y 1980, tuvo que sortear además la censura y someterse a estrictas reglas. Sin embargo, gracias a la temática de su cine, pudo tratar temas tabús y enormemente controvertidos en aquel periodo como el divorcio, en Kur po Xhirohej një film [Mientras se filma una película,1981]; la sociedad de hijos únicos, en Taulanti kërkon një motër [Taulant quiere una hermana,1984]; o la malacrianza en la clase pudiente albanesa en Mimoza llastica[Mimoza caprichosa, 1973] o Kryengritje në pallat [Revuelta en el palacio,1972]. Las fábulas y metáforas del mundo infantil no solo le permitieron salvar la censura, sino también representar en pantalla los sueños de un mundo diferente para una nueva generación. Pese a sus logros, Xhanfise Keko continúa siendo una cineasta desconocida en la historia del cine, hecho que ha motivado la realización de este ciclo.
―Con la presentación en el primer pase de Chema González, jefe de Actividades Culturales y Audiovisuales del Museo Reina Sofía, y Denise Keko Andoni, nieta de Xhanfise Keko y activa promotora del legado fílmico de la cineasta. El historiador del arte y realizador Mark Cousins presenta en vídeo la película en el segundo pase
Tomka y sus amigos juegan en su campo de fútbol hasta que un día los nazis invaden el pueblo y usan el campo como almacén de munición. La escenificación de la guerra borra el juego infantil, condición que el grupo no está dispuesto a aceptar. Ante la situación, Tomka y sus secuaces acabarán confabulándose para recuperar su espacio de juego tomado por los nazis. Keko utiliza esta aventura para hablar de la resistencia partisana en la Segunda Guerra Mundial a nivel histórico, pero también de la resiliencia en la Albania contemporánea bajo el duro régimen estalinista de Enver Hoxha. Se trata de un filme de aspecto simple y naturalista, rodado en blanco y negro con una enorme carga poética.
-Con la presentación en vídeo en el primer y segundo pase de Thomas Logoreci, editor, productor y escritor de cine. Co-fundador de The Albanian Cinema Project, plataforma para la preservación y difusión del cine albanés
Sobreprotectores, los padres de Beni no le dejan jugar en la calle, quien ha perdido el contacto con la vida cotidiana. Su tío acude desde el pueblo para rescatarlo y llevarlo a pasar las vacaciones de verano. Allí Beni conecta con la naturaleza y vuelve poco a poco a una vida verdadera en esta fábula de crecimiento y transformación personal. Interpretado por Herion Spiro Mustafaraj, el niño fue seleccionado entre más de 4 000 infantes de entre 7 y 8 años de las escuelas públicas, convirtiéndose en una figura mítica del cine albanés, y la película en uno de los filmes más sensibles sobre la necesidad de proteger a la infancia de las obligaciones y dependencias del mundo adulto.
―Con la presentación en el primer y segundo pase de Ilir Keko, hijo de Xhanfise Keko y periodista de la Radio Televisión Albanesa
Mimoza caprichosa forma un díptico con Kryengritje në pallat [Revuelta en el palacio, 1972], una fábula surrealista en la que los juguetes rotos cobran vida y realizan un juicio sumario a los dos niños que los han destrozado. Mimoza es una niña que no quiere compartir sus juguetes, arruina el juego en el patio y es conocida como “la malcriada”. Comienza a sentirse sola y se da cuenta que echa en falta la alegría proporcionada por el juego en grupo. Arrepentida, Mimoza inicia una transformación hasta volverse a juntar con el grupo de amigas y jugar todas juntas en el patio. La representación de la malacrianza convive con visiones desoladas de la ciudad contemporánea y cuenta con potentes retratos en un montaje sobresaliente, aprendido por Keko en su estancia en Moscú entre 1950 y 1952.
-Con la presentación en vídeo en el primer y segundo pase de Regina Longo, historiadora del cine, programadora y profesora en la Universidad de Brown. Co-fundadora de The Albanian Cinema Project, plataforma para la preservación y difusión del cine albanés
Junto a Kur po xhirohej një film [Mientras se rueda una película, 1981], película dedicada al divorcio, Taulant quiere una hermana es otro de los filmes en los que Keko aborda asuntos controvertidos y tabús en la sociedad albanesa. En este caso, se trata de la profusión de familias con hijos únicos, en particular en la clase acomodada. Los padres de Taulant son dos profesionales intelectuales a quienes su hijo intenta convencer de su soledad. Ninguno tiene en cuenta la fijación del niño, quien decide ante su nula respuesta resolver él mismo la situación. Ahorra dinero y acude al hospital materno a comprarse una hermanita. Tras realizar esta sensible y satírica película, Keko abandonó el cine por problemas de salud dejando atrás un corpus fílmico que bien resumen sus propias palabras: “cuanto más profundo entras en el mudo de los niños, más aprendes, no importa que hayas tenido experiencias previas. Frente a su mundo, siempre creo que todos somos aprendices”.