'Fusilamientos en la plaza de toros de Badajoz', de Martí Bas (1937) - MNAC
El museo incorpora a la colección permanente piezas del Pabellón de la República de 1937
Románico, gótico, modernismo y, a partir de ahora, también Guerra Civil. Tampoco es que el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) le haya dado la espalda al arte que nació y creció bajo las bombas (ahí está, sin ir más lejos, la imponente colección de cartelería y propaganda que podía verse en una de las salas del Palau Nacional), pero el director del museo, Pepe Serra, ha querido ir un poco más allá y consolidar «la posición del museo en la Guerra Civil española desde el punto de vista del arte».
Un impulso que se traduce en tres nuevas salas (hasta ahora había sólo dos) y más de un centenar de obras, muchas de las cuales no se habían expuesto nunca en el museo, de 43 artistas diferentes. Es el caso, por ejemplo, de 'Alegoría de la muerte de Federico García Lorca', de Fernando Briones, o de 'Fusilamientos de plaza de toros de Badajoz', en la que Martí Bas plasmó sobre el lienzo el fusilamiento de 3.000 personas.
«Conscientes de la necesidad de dar a conocer el drama al mundo y de coordinar la difusión interior y exterior de la imagen de la lucha antifascista, las instituciones republicanas ponen en marcha sistemas de propaganda. Las artes tradicionales se unen en una movilización total que lleva a culminar algunas de las aspiraciones del arte moderno y la vanguardia. En menor medida, el bando insurrecto también recurre a las artes como vehículo de propaganda y contrainformación, estableciéndose así una dialéctica de fuerzas», exponen los responsables de las nuevas salas.
En este sentido, una de las novedades es la recuperación de más de una treintena de obras que se expusieron junto al 'Guernica' de Picasso, 'La Montserrat' de Juli González y el 'Payés catalán en rebeldía' de Miró en el Pabellón de la República Española de la exposición de París de 1937.
Obras muchas de ellas que se dieron por perdidas durante décadas pero que en realidad se conservaron medio escondidas en el Palau Nacional de Montjuïc hasta mediados de los ochenta. Ahora, años después de aquello, se puede volver a ver'La bañista', escultura de Francisco Pérez Mateo que se expuso en el exterior del pabellón, compartiendo espacio con 'Mujer con gorro y cuello de piel', de Picasso, y 'Cabeza de Montserrat gritando', de Juli González.
Fotografía y propaganda
Elena Llorens y Eduard Vallés, conservadores del museo y responsables de las nuevas salas, han querido organizar las obras alrededor de temas como las mujeres en tiempo de guerra, los bombardeos y masacres de la población civil, el fotoperiodismo, la propaganda y el cartelismo… Es así como esta nueva museografía conecta las fotografías de Centelles y Campanyàcon el cartelismo de Carles Fontseré y Arturo Ballester. O los aguafuertes de Tomás Fabregat con las esculturas de Juli González y Apel·les Fenosa.
Un retrato de Lina Odena, secretaria general de las Juventudes Comunistas de Cataluña y ayudante de La Pasionaria, firmado por un desconocido J. Pons; la escultura de gran formato 'El Madriles', dedicada a un miliciano y esculpida por el mismo autor que firmaría años más tarde la estatua ecuestre de Franco que permaneció en Montjuïc hasta 2008; y la reciente adquisición de 'Encuentro de una miliciana con la muerte', óleo que el pintor Pere Pruna realizó entre 1936 y 1939, completan las principales novedades de una reordenación que viene a coronar la temporada que el MNAC ha querido centrar en la Guerra Civil con exposiciones como la de Antoni Campanyà o la instalación de dos bombarderos republicanos a cargo de Francesc Torres.
Fuente: ABC
VER LAS NUEVAS OBRAS DE LA GUERRA CIVIL EN EL MNAC: https://www.elperiodico.com/es/fotos/ocio-y-cultura/9-obras-guerra-civil-nuevas-11908263