El Monumento al soldado rumano libertador de Targu Mures es una de las principales atracciones turísticas de la ciudad transilvana. Está situado en la Plaza de las Rosas (Piata Trandafirilor), junto al Palacio de la Cultura.
Fue realizado por el célebre escultor húngaro-rumano Istavn Csorvassy, reconocido por la Republica Popular Rumana en 1952 con el Premio de Estado, con la colaboración de Izsak Marton, siguiendo el modelo del Monumento al Soldado Sovietico Libertador de Bucarest, realizado por Constantin Baraschi en 1946.
El Monumento de Targu Mures fue un homenaje a las tropas rumanas que, acompañadas por el Ejercito Rojo, limpiaron Transilvania de hordas nazis y de colaboracionistas fascistas, durante el otoño de 1944.
La altura de la estatua es de 5 metros y, a similitud de la estatua de Baraschi, representa a un soldado en pié enarbolando una bandera agitada por el viento. El pedestal tiene una altura de 11 metros, y en sus laterales presenta dos bajorrelieves en marmol blanco, que reproducen escenas de la lucha contra el fascismo y por la liberación de Transilvania.
En uno de los bajorrelieves se aprecia que, junto a los soldados regulares, aparecen también partisanos obreros que, con gran entusiasmo, son los que se transforman en la vanguardia de la doble liberación: la territorial y la de clase.
Fuente: Un Vallekano en Rumanía