TEXTO ESCRITO POR EL ESCRITOR ALEMÁN HACE 100 AÑOS
"LAS PATATAS"
He leído unos de estos libros patrióticos que analizan detenidamente al ejército alemán. Había también un recuerdo histórico que merece ser observado de cerca.
Durante el asedio a París en el año 1870, explica el autor, las avanzadillas enemigas mantuvieron unas relaciones bastante aceptables. No siempre estaban disparando unos contra otros, ¡ni mucho menos! Alguna vez, por ejemplo, en momentos de dificultad, se ayudaban con patatas. La mayoría de las veces, según dice, fueron los alemanes los que hicieron de salvadores en la necesidad. Pero una vez se acercó un grupo francés de unos pocos hombres, los alemanes cogieron los fusiles y de pronto uno de ellos dijo en alemán: «¡No disparéis! ¡Nosotros tampoco disparamos!» y empezaron a negociar el intercambio de bebidas.
En este caso se podría hablar de «crimen de alta traición» y luego realmente una orden del ejército prohibió terminantemente estas aproximaciones. Pero en el fondo, ¿de qué se trataba en este caso?
Evidentemente, de desacreditar la guerra. Porque se puede suponer que los que por ambos bandos habían olvidado su deber no provocaron nada grave. Seguramente debían de ser padres de familia, trabajadores, campesinos, a los que habían puesto un uniforme de un color determinado y les habían dado la orden de disparar contra los que lo llevaban de otro color.
¿Por qué no dispararon? Evidentemente, el odio nacional, la rabia que supuestamente había hecho levantar a todo el pueblo alemán, no debía de ser tan grande como cuando, en la avenida Unter den Linden, todavía no estaba permitido disparar contra sus semejantes. Entonces más de uno había gritado, porque todos gritaban, pero eso no obligaba a nada. Pero aquí había hombres que durante todo un verano y todo un invierno habían experimentado en su propia carne qué significa matar, y qué significa pasar hambre. Y allí desapareció el «odio profundamente enraizado» y comieron patatas todos juntos... Las mismas patatas; los mismos capitalistas. Pero uniformes diferentes. Eso es la guerra.
(Publicado el 9 de julio de 1913)
Fuente: Entre el ayer y el mañana (Ed. Acantilado)