EN PERSPECTIVA: KONSTANTIN MELNIKOV
Melnikov no solo fue un conocido arquitecto ruso, también ha sido el principal representante del constructivismo ruso, movimiento vanguardista tanto artístico como arquitectónico que surge en 1914 y cuyo momento de mayor presencia fue después de la Revolución de Octubre.
Otro de los grandes exponentes del constructivismo fue Tatlin, quien combinaba la estética de las máquinas con los componentes de las máquinas para crear arquitectura, su obra más conocida es el Monumento a la III Internacional.
Pero volviendo a Melnikov, quien nació en Moscú en 1890, estudió pintura y luego arquitectura en la Escuela de Pintura, Escultura y Arquitectura de Moscú de donde se gradúa en 1917. A partir de este momento, lo primero que hizo fue desarrollar un plan urbano para Moscú y luego trabajó como maestro hasta 1923 en la misma escuela en la que había estudiado. Es después de este momento cuando se puede apreciar un cambio drástico y radical en su obra y dedica gran parte de su tiempo a estudios de innovación en el campo de la arquitectura.
Su primera gran obra fue el Pabellón Soviético para la Exposición Internacional de Artes Decorativas e Industrias Modernas en París, en el año 1925. Este trabajo llamó poderosamente la atención internacional al carecer de toda decoración y reflejar la visión más vanguardista de la recién formada U.R.S.S. Las bases del concurso ya establecían que “la construcción debía ser de madera, en una superficie, de unos 325 m2, resuelta en dos niveles. El nivel inferior debía estar dedicado a la variedad étnico-cultural de las naciones que conformaban la Unión y el nivel superior, a mostrar el interior de cuatro espacios significativos: un club obrero, una casa obrera, una sala de lecturas y un hogar infantil, como una manifestación de la nueva sociedad.”
Pabellón Soviético
A raíz del viaje a París para supervisar la construcción del pabellón, Melnikov conoció a Le Corbusier y también recibió el encargo por parte del ayuntamiento de París para el proyecto del Garage 1000, un aparcamiento para 1000 automóviles, que finalmente no fue construido. Aunque es con la base de estos estudios para aparcamientos con los que logra construir en 1927 los Garages Bakhmetevsky en Moscú, en colaboración con Vladimir Shukhov. El edificio es un claro ejemplo del uso de sistemas industriales aplicados a la arquitectura de vanguardia. Recientemente ha sido restaurado y transformado en una galería de arte.
Garage 1,000
En 1927 comienza lo que el mismo Melnikov llama “su época dorada”, en la que desarrolló varios proyectos de clubes para obreros, siete en total, entre ellos el Club Rusakov, encargado a Melnikov por el sindicato de los obreros tranviarios de Moscú señala con el vértice de su cuerpo de servicios al depósito municipal de transportes metropolitanos. La forma de cuña, base del diseño, dota al proyecto de nuevas posibilidades escultóricas y simbólicas.
Club Rusakov
Llama la atención también en esta época, el Kauchuk Factory Club, finalizado en 1929 y encargado a Melnikov en un momento en el que el gobierno ruso buscaba sustituir las manifestaciones religiosas por entretenimientos más apropiados a la visión comunista del momento. La planta del club tiene la forma de un cuarto de cilindro y albergaba un teatro para 800 personas. Como la mayoría de edificios de esos años, el Kauchuk Club estaba destinado a ser demolido, hasta que en el año 2007 las propuestas para preservarlo y restaurarlo salieron adelante.
Kauchuk Factory Club
Una de sus obras mejor conservadas es su propia casa, construida también en 1929, es ahora el Melnikov House Museum, una iniciativa que se ha dado a la tarea de restaurar la casa y mantener con sus trabajos, la mayor fidelidad posible a la construcción original.
Casa Melnikov
La casa se localiza en pleno centro de Moscú y fue construida inicialmente como modelo para las casas obreras. Su diseño consiste en dos torres cilíndricas de color blanco con una serie de ventanas hexagonales distribuidas simétricamente a lo largo de toda su fachada. En total son 200 aberturas, la construcción se realizó con madera y ladrillo.
En 1933 creó su propio estudio en Moscú, en unos talleres colectivos llamados Mossovet. Este mismo año tuvo lugar en Milán una exposición dentro del marco de la Trienal de las Artes Decorativas y la Arquitectura, en ella se presentaba el trabajo de 11 conocidos arquitectos, entre los cales, Melnikov era el único ruso.
En 1954 comenzó a participar nuevamente en diversos en concurso, el primero para diseñar un Panteón dedicado a prominentes figuras de la historia de Rusia y para celebrar los 300 años de la unión Ruso-ucraniana, pero el desencanto en el que se encontraba sumido lo había hecho volver a las formas casi clásicas y no obtuvo ni una mención. Luego participó en el concurso para el Palacio de los Soviéticos y en el proyecto para People’s Commissariat of Heavy Industry (1934), un proyecto utópico muy interesante por sus bases estéticas.
People's Commissariat of Heavy Industry
Melnikov murió a los 84 años, en 1974 dejando un gran legado, no solo por su obra construida, si no por la gran cantidad de proyectos en los que plasmó su mirada innovadora y vanguardista.
Cita: Ethel Baraona Pohl. "En perspectiva: Konstantín Melnikov" 03 ago 2016. Plataforma Arquitectura. Accedido el 28 Nov 2016.